El dulce regalo de la naturaleza.

Las frutas son un regalo de la naturaleza, que además de aportar colorido y belleza a las mesas, forman parte de la dieta básica de todos los lugares del mundo. Contienen nutrientes imprescindibles para el hombre y su versatilidad permite elaborar un sinfín de platos, en particular deliciosos postres.

Aporte Nutricional

Además de aportar vitaminas, las frutas se caracterizan por su bajo contenido en grasas y proteínas, y la abundante presencia de carbohidratos, principal fuente de energía del cuerpo.

Las reinas de la vitamina C

Las frutas son una extraordinaria fuente de vitaminas, esenciales para el crecimiento, para reponer los tejidos dañados y para regular el metabolismo. Muchas de ellas no pueden formarse en el cuerpo, como la vitamina C, imprescindible para fortalecer huesos y dientes, y mantener un sistema inmunológico saludable, por lo que es necesario ingerir alimentos que la contengan. Se recomiendan unos 60mg al día, cantidad que se obtiene de sobra con comer un kivi, medio papaya o una guayaba, las mayores fuentes de vitamina C entre las frutas.

La fruta en los postres

Reinas de la dulzura, son pocos los postres que no incluyen la fruta en su elaboración. Existen muchos tipos de fruta: de pulpa dura, blanda, con hueso, con pepitas, bayas, cítricos… y casi todas pueden consumirse al natural, directamente recogidas del árbol o del arbusto, sin necesidad de ningún tipo de preparación. Además, gracias a los invernaderos es posible degustar frutas frescas fuera de tiempo de cosecha, y las conservas y la congelación han hecho el resto para que cualquier repostero pueda valerse de ellas en cualquier momento.
Sus aplicaciones son infinitas: salpicones, comportas, buñuelos, souffles, helados, sorbetes, granizados, gelatinas, salsas dulces, cremas dulces, purés, en tartas, con crema batida… y siempre quedan increíbles.

Gracias a los tratamientos químicos al que son sometidas para evitar las plagas, algunas frutas tienen un aspecto perfecto, pero sopor eso son de mejor calidad. La buena fruta tiene una piel “viva” que no es ni demasiado encerada ni demasiado fijo, y su perfume no es ni muy acre ni muy dulzon.

Consejo para su consumo

Es importante que la fruta sea fresca y lavarla bien antes de comerla para eliminar los plaguicidas. También hay que considerar otros factores para que su consumo sea saludable:

1. La fruta debe consumirse en su punto justo de maduración. Si aun esta verde es más indigesta y menos nutritiva.
2. Es mejor comerla en crudo ya que cualquier proceso, incluso el troceado, reduce el aporte de vitaminas, muy sensibles al aire.
3. Los productos químicos se concentran bajo la piel, así que es mejor pelar la fruta si no proviene de un cultivo biológico.